Término que proviene del latín definitío y refiere a la proposición o fórmula por medio de la cual se define. En lingüística, es la declaración de cada uno de los vocablos, modos y frases que contiene un diccionario.
La definición es también, junto con la división y la demostración, uno de los procedimientos generales utilizados por la ciencia. Hay dos tipos de definición: la nominal que hace referencia a la expresión o palabra utilizada, y la real, que alude al objeto mentado por la expresión.
La definición nominal puede ser, a su vez: 1) sintáctica, cuando es de uso exclusivamente lógico o lingüistico; su forma más directa consiste en sustituir una expresión compleja por otra simple; 2) semántica, explicación del significado de la palabra, 3) etimológica, cuando define atendiendo al significado de la lengua originaria de la cual procede el término, 4) asignativa o por indicación, cuando por definición se asigna una palabra a un objeto dado; y 5) determinativa, que indica cómo debe entenderse un determinado concepto (Código Civil).
La definición real puede ser, 1) esencial, la que define el objeto, proporcionando el género próximo y la diferencia específica, es decir, el género al que pertenece y la nota característica o distintiva; 2) genética o casual, que determina el origen del objeto; y 3) descriptiva o accidental, cuando especifica las cualidades o propiedades de un objeto.
Los requisitos que tiene que cumplir toda definición para que sea correcta, son: que sea más claro el definiens (lo que define) que el definiendum (lo que se ha de definir); que lo definido no entre en la definición; y que el definiens ha de convertir a la totalidad del definiendum y sólo a él.