La palabra proviene del latín universus y refiere a la suma de todo lo existente. El universo ha despertado desde los comienzos de la humanidad gran curiosidad y ha sido objeto de distintas conjeturas en cuanto a su composición y creación.
La cosmología es la encargada de estudiar el origen, la evolución y estructura a gran escala. En este nivel, está compuesto por las galaxias agrupados en cúmulos y a su vez, en subcúmulos. A pesar de la falta de uniformidad de la distribución de la materia contenida en el universo, se considera que éste presenta las mismas características generales en cualquiera de sus puntos, idea fundamental del principio cosmologico.
Diversos astrónomos de la Antiguedad, entre ellos Kepler, Tycho Brahe, Copérnico y Galileo Galilei dieron origen a los primeros modelos científicos. Fue Galileo Galilei el primero en deducir a partir de observaciones realizadas a través del telescopio, que el universo podía tener mayores dimensiones que las dadas por la esfera de las estrellas fijas supuesta hasta entonces. Con su aporte nace la cosmología moderna.
Los fundamentos de la cosmología moderna se deben a E. Hubble, quien detectó el corrimiento hacia el rojo de las rayas del espectro de las galaxias lejanas y en 1929 propuso la hipótesis de la expansión del universo como un todo considerando que la velocidad del alejamiento mutuo de las galaxias es proporcional a las distancias que las separa.
El modelo más aceptado en la actualidad es el llamado Big Bang que propone que toda la materia y la radiación en el pasado estaban comprimidas y calientes, y que existe un tiempo cero a partir del cual el universo evoluciona, comenzando en una gran explosión. La posterior comprobación de la existencia de la radiación cosmológica le permitió a la teoría del Big Bang imponerse sobre las restantes.