Se denomina manzana al fruto que se obtiene del árbol del manzano, de forma más bien globoza, de unos 6cm de diámetro, de corteza delgada, lisa; pudiendo ser sus colores de un verde claro, colorado o amarillo pálido. Su pulpa es carnosa, de sabor acídulo o ligeramente dulce y con semillas pequeñas de color caoba o amarronadas.
Es considerada por médicos y nutricionistas, una fruta muy beneficiosa para la alimentación de los individuos ya que posee múltiples características.
Es rica en pectina, una fibra soluble que ayuda para los problemas de colesterol en sangre y por consiguiente, evita el riesgo de sufrir accidentes vasculares. Su consumo está indicado para enfermos de diabetes ya que estabiliza el nivel de azúcar en la sangre.
Otro componente importante presente en la manzana es la quercetina, una especie de colorante natural que funciona como antioxidante y colabora como preventivo de diversas enfermedades, inclusive de tumores cancerígenos.
El consumo de manzana a su vez, ayuda a regular la actividad intestinal, sirve tanto para frenar diarreas como para evitar estreñimiento gracias a sus distintos componentes (azufre, zinc, fructosa, fibra, sorbitol, etc).
La manzana también contiene Vitamina C que ayuda a reforzar las propiedades antioxidantes de los bioflavonoides; Potasio, el cual está indicado para dietas de adelgazamiento; y posee además propiedades bacteriostáticas, constituyendo un excelente dentrífico natural.
El consumo de manzana se encuentra de forma variada, puede ser en estado crudo ( natural ) como elaborada en mermeladas, compotas o purés. Productos como vinagres, sidras o jugos de manzana se ofrecen en la mayoría de los mercados.
En distintos paises suelen prepararse diversas tortas y tartas regionales cuyo componente principal es la manzana (por ej. el strudel). Sin dudas, una fruta que además de su sabor dulce y agradable para el paladar, es altamente nutritivo y saludable para personas de cualquier edad.