La hidrosfera es un subsistema formado por toda el agua que contiene el planeta en su superficie, su interior y su atmósfera.
El agua se halla distribuida formando lagos, mares, ríos, océanos, glaciares, vapor de agua, etc.; es decir, que nos referimos al agua en su forma líquida, congelada y como vapor; esta última condición presente en la atmósfera.
El agua es uno de los recursos más valiosos que nos brinda el planeta, pero aunque nos pueda parecer ilimitado, puesto que el volumen del agua existente en todo el mundo es de 1.360 millones de km³ (1.360 trillones de litros), sólo el tres porciento es dulce, y la mitad de ella potable.
Este subsistema y su interacción con el sol y la atmósfera, influyen notablemente en la temperatura. El agua permite además la vida en La Tierra, y según se cree, las primeras formas de vida se originaron en ella.
La mayor cantidad de agua es la contenida por los mares y océanos, éstos cubren cerca del setenta porciento de la superficie terrestre y son la fuente más notable de vapor de agua. Esta inmensa masa de agua se caracteriza por ser salada, a diferencia de los ríos, cuya agua es dulce.
En menor proporción que las aguas saladas, se encuentran las aguas dulces, clasificadas en: aguas subterráneas, lagos, hielos, ríos, vapor y pantanos. Las mismas, si bien son denominadas “dulces”, poseen sales disueltas, aunque en un nivel muchísimo menor que el de las aguas saladas.