Su término proviene del latín admordium, de amordere (morder ligeramente) y refiere a la primera comida principal que se ingiere durante el día, generalmente alrededor del mediodía. En algunos lugares, el almuerzo también refiere a la comida que se consume entre el desayuno y la comida del mediodía. Ambas valoraciones son correctas.
La composición y las cantidades de cada almuerzo tienen una íntima relación con los distintos hábitos de cada población. Existe una gran variedad de tradiciones culinarias que dependen de la étnia, el país o los factores climáticos que posee cada individuo. Por ejemplo, para los países mediterráneos el almuerzo es considerada la comida principal, no es lo mismo en el caso de las culturas anglosajonas cuyo valor es ínfimo.
En referencia a los lugares donde puede realizarse un almuerzo, los mismos dependerán en parte de la actividad que esté realizando la persona y sus posibilidades económicas. Para aquellos individuos que trabajan, algunas empresas ofrecen comedores para almorzar a sus empleados en planta, lo cual resulta muy beneficioso para el trabajador.
También existen almuerzos de negocios donde se utiliza este momento con ciertos fines comerciales. En otros casos, los empleados deben recurrir a restaurantes, casas de comidas o deliveries, para saciar su hambre. El almuerzo en estos casos, significa también un momento de descanso laboral donde se puede interactuar con otros compañeros y hacer sociales.
Un lugar de almuerzo muy común es la casa familiar donde los niños y sus padres comparten sus hábitos alimentarios en compañía y pueden elaborar sus comidas como más les apetezca. El momento del almuerzo es una buena oportunidad para elegir aquellos elementos nutritivos que le proporcione al organismo todas las vitaminas y minerales necesarias para una mejor alimentación.